¿Es importante la actividad física en el adolescente?

En el momento actual, ha aumentado un estilo de vida sedentario por el uso de diferentes aparatos tecnológicos que permiten una vida menos activa: ascensores, electrodomésticos, escaleras eléctricas, TV, computadoras, etc. Es posible que en este tipo de vida la ingesta puede resultar excesiva para el gasto y sea causa de sobrepeso y obesidad. 

Por este motivo, es muy importante que se recomiende un apropiado nivel de actividad

física que compense los hábitos sedentarios y que promueva flexibilidad, fuerza muscular y aumento de la masa ósea. Se ha demostrado que la actividad física aumentada convenientemente tiene una repercusión favorable en la salud; no solo se han demostrado efectos a nivel físico, de aumento de la masa ósea y masa muscular, sino también una repercusión en la maduración cognitiva y mejor rendimiento, por tanto se trata de conseguir los efectos positivos obviando los negativos. Los resultados son evidentes en el adolescente. Las propuestas de la OMS para este grupo de edad quedan recogidas en lo siguiente:
* Realizar al menos 60 minutos (1 hora) al día de actividad física con una intensidad de moderada a vigorosa; estos 60 minutos pueden alcanzarse también sumando periodos más cortos a lo largo del día. 

* Incluir, al menos tres días a la semana:
– Actividades de intensidad vigorosa.
– Actividades de fortalecimiento muscular y de mejora de la masa ósea que incluyan  grandes grupos musculares.
* También resulta fundamental reducir los periodos sedentarios prolongados: 

– Limitar el tiempo frente a la televisión u otras pantallas (móviles, videojuegos, or- denadores, etc.) con fines recreativos a un máximo de dos horas al día. 

•  Minimizar el tiempo de transporte motorizado (en coche, en autobús, en metro) y fomentar el transporte activo, recorriendo a pie o en bici al menos parte del camino.
  – Fomentar las actividades al aire libre.